Análisis caso Dove
- Marta Monforte Jaén
- 19 nov 2014
- 2 Min. de lectura
Análisis

Dove realiza un anuncio que crea polémica por posible racismo. En la imagen se muestra a tres mujeres, en la imagen aparece a la izquierda una mujer de raza negra, junto al cartel de “Antes” con una muestra de piel más imperfecta, mientras que en el otro extremo aparece una mujer rubia de raza blanca, y visiblemente más delgada junto al cartel de “Después” como queriendo indicar que ésta tiene la piel más bonita y suave. Todo ello con una mujer de raza latina en el medio de las dos mujeres.
La marca Dove, que siempre ha estado caracterizada por elegir mujeres para sus campañas publicitarias con todo tipo de cuerpos, por lo que ha proyectado buena imagen y destinándose a públicos más “reales”, ha visto afectada su imagen y por tanto, su reputación. Los stakeholders pueden quedar insatisfechos cuando el mensaje llega mal. He aquí pues un error que puede acabar destruyendo mucho trabajo.

En la sociedad actual, hay temas muy sensibles sobre los que las empresas deben tener mucho cuidado ya que de no tratarse de la forma adecuada pueden saltar las voces de protesta y dañar así la imagen corporativa. El sexismo, la homofobia o el racismo son algunos de los temas con los que cabe tener especial precaución y así lo demuestra el revuelo creado en torno a la campaña de Dove.

Con la imagen se puede deducir que ser una mujer blanca y delgada, te sitúa en una posición superior a ser una mujer latina (que sería el intermedio) o a ser una mujer de raza negra, que además cuenta con una piel arrugada y sin cuidar. Viendo la fotografía se pueden comprender las voces que acusaban a la campaña de racista. Es muy probable que las cosas se hayan sacado de contexto, y de que esta no fuera la intención de la marca, pero hoy en día hay que prestar atención a cada detalle. Puede, que si la situación hubiera sido al contrario nadie se hubiera dado cuenta, pero lo que yo creo que hay que prestar atención al colectivo que más ha sufrido discriminaciones, en la historia de la humanidad, las personas negras.
Para solucionarlo, propondría una nueva campaña dedicada a todas las mujeres, sin excepción, en la que se evidenciara que Dove deja la misma piel en todas las mujeres y dejara claro que el color no importa. Algo que dijera que la mujer es la principal protagonista. Si yo fuese la Dircom, volvería a su eslogan de cuerpos perfectamente imperfectos e intentaría potenciar ese lado positivo que se han labrado durante tantos años.
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